SODOMA Y GOMORRA: HISTORIAS DE LA BIBLIA.

Percátese de la demoledora historia de la ciudad del pecado y la fatalidad
que le espera a todos aquellos que hacen el mal.

PECADOS DE SODOMA Y GOMORRA

Sodoma y Gomorra brincan al son de los pitos, flautas y silbatos; Francachelas y comilonas vuelan por los aires, jóvenes y viejos se deslizan por doquier, mujeres y hombres al unísono se rasgan las vestiduras, todos son cautivos a la par por el delirio, las rarezas y las extravagancias.

Las calles, barrios y plazoletas exudan erotismo, euforia, obscenidad y decadencia; Sus acciones rebasan de lejos las sanas costumbres de la alegría y se sumergen en las profundidades del vicio, del pecado y del crimen.

Las urbes no descansan y su ruido, desatine y putrefacción suben hasta los aposentos del Señor, generándole olores no loables a sus sentidos y conductas no aptas a sus preceptos.

Ofendido Dios de la lascivia, concupiscencia y corrupción moral y espiritual en extremo de tan degenerados pueblos, decide tomar acciones contra tales linajes inicuos, alejados de su palabra, amor y temor.

Su decisión lo abarca todo, ha de ser exterminado todo habitante, todo ser que respire el aire de dichas capitales imperfectas perecerá y se purificaran así de raíz las prácticas y conductas que serán heredadas por las futuras generaciones bendecidas por el Señor.

También en Godeus:

ABRAHAM INTERCEDE POR SODOMA

Dios, en conversación divina, comparte sus planes con Abraham, el cual, en sano juicio, lamenta las decisiones del Creador al juzgar a justos e impíos por igual y le manifiesta:

¿También destruirás al justo junto con el impío? (Génesis 18:23).

Qué tal que de pronto hallan 50 justos en esa ciudad, por amor a ellos aun así la destruirás, porque han de sufrir la misma suerte, eres el juez de la tierra ¿No has de hacer lo más justo?

Dios le responde: Si los encuentro, perdono la ciudad por afecto a ellos.

Y si son menos los justos: Cuarenta y cinco, cuarenta, treinta, veinte o diez ¿Perdonarás el lugar? Espeto Abraham.

Por amor a ellos los perdonaré, dijo el Señor y se fue.

También en Godeus:

DESTRUCCIÓN DE SODOMA Y GOMORRA

Habiendo encontrado a Lot, solo un hombre justo en Sodoma y Gomorra, El Dios de los ejércitos decide salvarlo a él y su familia y da inicio a su furia demoledora contra la ciudad del pecado.

Desde las aberturas del espacio exterior, descienden en picada dos ángeles del Señor a la capital del vicio, acompañados de fuego y azufre en sus extremidades, fumigando a diestra y siniestra a cuanto esperpento se mueva.

Gritos y alaridos resuenan en las paredes ardientes; Castillos y moradas caen como ramas de árboles, animales y aves huyen despavoridas, riachuelos y quebradas se tiñen de rojo y el humo extiende su estela hasta el horizonte lejano.

Caos, violencia y destrucción heredan las perversas masas reducidas a polvo, muerte, desolación y estragos adornan las ruinas de la sabana; Así es la furia del Dios de la justicia para todos aquellos en cuyo corazón solo hay maldad.

Dios la da y Dios la quita, solo Él es el dueño de la vida, solo Él decide quien vive y quien muere, solo Él imparte justicia hasta el final de los tiempos, grande es su poder, grande es su ira, grande es su misericordia.

Y volvió Abraham al sitio donde estableció encuentro celestial con Dios y alzo su mirada a las cercanías de las urbes y diviso humo palpitante y furioso como si de calderas se sacara, y contemplan sus ojos fulgurantes y sus manos temblorosas la herencia que reciben todos aquellos adefesios que hacen el mal: La muerte.

También en Godeus: